El Monasterio de São Vicente de Fora es una de las principales atracciones turísticas de Lisboa, ubicado en la colina de S. Vicente, en el barrio de Alfama, muy cerca del Panteón Nacional y del mercadillo Feira da Ladra.
Durante el sitio de Lisboa, en 1147, D. Afonso Henriques – el primer rey de Portugal – hizo una promesa: si lograba conquistar la ciudad, ordenaría la construcción de un monasterio dedicado a S. Vicente, un santo venerado que más tarde se convirtió en santo patrón de Lisboa. Este monasterio medieval fue fundado en el mismo año, en el lado “exterior” de las murallas de la ciudad, lo que justifica la toponimia del edificio.
Durante el siglo XIII, Santo António visitó el Monasterio de S. Vicente de Fora, donde pasó sus primeros días como monje.
Desde su fundación, en el siglo XII, hasta hoy, mucho ha cambiado en la arquitectura de la iglesia y monasterio de São Vicente de Fora. Del primitivo monasterio al megalómano proyecto del rey Felipe I de Portugal, pasando por las artes decorativas de la dinastía Braganza e incluso la readaptación del monasterio como espacio museístico en el siglo XX.
Características
El monasterio es conocido por su fachada adornada con elementos decorativos, entre columnas, arcos y esculturas; por los dos claustros al sur de la iglesia, que están cubiertos con paneles de azulejos; por su sacristía todavía en uso y considerada el ex-libris del monasterio por su decoración con marquetería de mármoles de colores, del siglo XVIII; y el aljibe cuya construcción data del siglo XII, siendo el principal vestigio de lo que queda del monasterio medieval fundado por D. Afonso Henriques y cuya principal función era almacenar el agua de lluvia que se utilizaría en las tareas domésticas del monasterio.
El Monasterio de S. Vicente de Fora presenta una variada oferta cultural en el campo de la arquitectura y las artes visuales.
De particular interés es la colección de magníficos azulejos, que es una de las más grandes del mundo. Hay unos 100.000 azulejos y están in situ, cubriendo las paredes y escaleras del monasterio. Aquí pueden encontrar todos los períodos de azulejos barrocos, desde el siglo XVII, con ejemplos de la famosa Real Fábrica de Cerámica, hasta la única colección de Fábulas de La Fontaine en azulejos en Portugal.
Hoy, el Monasterio de S. Vicente de Fora es una importante atracción turística en Lisboa y está abierto al público para visitas guiadas. Es el lugar ideal para los interesados en la arquitectura, el arte y la historia. Así, la vista desde el monasterio también es un atractivo, permitiendo una vista única de la ciudad de Lisboa y el río Tajo.